En todas las disciplinas, ya sean ecuestres o equinas, los resultados dependen del estado de forma del caballo. La genética, el entrenamiento y la nutrición son parámetros esenciales que hay que controlar. Pero pueden no ser suficientes para sacar a relucir todo el potencial del caballo. Aquí es donde entran en juego el calentamiento muscular y la recuperación del sistema musculoesquelético. ¿Por qué es importante apoyar el sistema musculoesquelético y cómo hacerlo?
Antes del ejercicio: calentamiento de los músculos del caballo
Como su nombre indica, el calentamiento sirve para que el cuerpo del caballo alcance la temperatura adecuada. El objetivo es movilizar los músculos y las articulaciones para evitar distensiones, tendinitis y otros trastornos musculoesqueléticos. El sistema cardiovascular también se moviliza durante esta fase. Además del calentamiento, esta fase también ayuda a acondicionar psicológicamente tanto al caballo como al jinete para la competición y el nuevo entorno en el que competirán.
El éxito en esta etapa clave lleva tiempo, porque tiene que ser gradual. En los deportes ecuestres (salto de obstáculos, CCE, resistencia), tiene lugar en la pista de recreo. En los deportes ecuestres (galope, trote, etc.), tiene lugar durante las series en el hipódromo. Es una buena idea preceder esta fase con masajes utilizando geles térmicos, que acelerarán el calentamiento de músculos y articulaciones. Es importante asegurarse de que estos productos no contengan capsaicina. La capsaicina puede hacer que los caballos den positivo en las pruebas de dopaje.
Después del ejercicio: la recuperación del caballo
- Recuperación activa
Después de someter a los caballos a una dura prueba, hay que fomentar la recuperación. Se distingue entre recuperación activa y pasiva. Por lo general, la recuperación activa consiste en trotar sin interrupción a un ritmo constante. Esto permite eliminar las toxinas (ácido láctico, urea, etc.) y normalizar la ventilación y la frecuencia cardíaca. Esta etapa es esencial para evitar las agujetas e incluso patologías como la miositis (o agotamiento sanguíneo). - Recuperación pasiva
Se consigue mediante el masaje y la aplicación de productos de cuidado externo. El uso de productos térmicos y/o lámparas de infrarrojos favorece el drenaje y la eliminación durante la fase de masaje. Tras esta fase inicial, la aplicación de esparadrapo en los tendones ayuda a reducir la inflamación al absorber los fluidos inflamatorios. El objetivo de la utilización de este tipo de productos es, por tanto, tensar los tejidos (propiedades astringentes) para prevenir la aparición de determinados defectos blandos (estrías, por ejemplo). Estos emplastos contienen arcillas listas para usar o diluidas en agua. Varían en cuanto a su origen (marino, terrestre), contenido en oligoelementos y, en su caso, suplementación.
La arcilla de Chausey es famosa por su contenido naturalmente rico en minerales. Estas cataplasmas pueden dejarse al aire libre o envolverse en papel o plástico film y tiras de reposo. Una vez seca, por ejemplo al día siguiente de su aplicación, la arcilla puede enjuagarse de las extremidades del caballo con agua.
Los geles refrigerantes son una alternativa a estas cataplasmas. Se aplican sobre los tendones del mismo modo que la arcilla, y sus propiedades astringentes ayudan a tensar los tejidos. La ventaja de este tipo de producto es que, al igual que la arcilla, no requiere aclarados prolongados.
La terapia de frío o crioterapia también se utiliza durante la recuperación. Puede llevarse a cabo mediante la aplicación de una compresa fría o utilizando métodos más sofisticados como la crioterapia con gas. Su eficacia está demostrada tanto en la recuperación muscular, para evitar calambres, como en la recuperación tendinosa, para reducir el riesgo de tendinitis. El uso de la crioterapia con gas requiere una formación específica.
Una buena gestión de la preparación para el ejercicio y la recuperación es esencial para garantizar el rendimiento y la longevidad de los caballos atletas. Todas nuestras soluciones de uso externo están disponibles en nuestros distribuidores: arcilla, polvo de Francia y nuestra gama de geles.
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